jueves, 29 de agosto de 2013

Ella

Ella, que no pide nada, y merece recibir más. Ella que siempre cree que el error es de ella, cuando a veces el problema son los demás.
Ella, que mientras estoy escribiendo, acaba de asomarse en la ventanita de mi skype.
Ella que se habrá enojado tantas veces conmigo, pero no me dijo nada…ella, que sabe callar, reflexionar y perdonar. Yo, que me habré enojado tantas veces con ella, y ella que me sorprende una vez más.
Ella, que odia las peleas y discusiones, y aunque le duela a veces, trata con su dulzura, de hacer reinar siempre la paz.
Ella que me acompañó en mis locuras, hasta detective fue conmigo, y no me da vergüenza decirlo porque fue hace unos cuantos años atrás! Ella, que me acompañó incluso a "una cita", y no estamos tan locas, juro que era una cita un tanto especial. ¡Jaja!
Ella que necesita que le recuerden cuánto vale! Porque si no, se le olvida, y le cuesta arrancar.
Ella, ella que tiene tantas virtudes, que es inteligente y honesta, valiente e independiente, que es sensible, que es constante, y es consecuente. Ella, que si le preguntaran, sólo diría que es honesta, constante e independiente.
Ella que elogia mis virtudes y habilidades. Ella que a veces sufre, pero sabe cómo levantarse.
Ella que a la hora de luchar por una buena causa, lo hace sin fin. Ella… que tiene principios y valores, ella... que sabe compartir.
Ella que es mujer orquesta, que trabaja y cocina, que limpia y se arregla, que habla idiomas y ¡dice no ser buena! Ella…que siempre peca de modesta.
Y ahí están, siempre, sus pequeños detalles y ella, que hasta se hizo presente en ciertas dolorosas fechas.
Ella… ella que brilla sin lentejuelas. Ella, que aunque no lo sepa, brilla más que un arbolito de navidad en plena noche buena.


Y la pasión de "ella" ♥


¡NOS VEMOS!

La fidelidad = 1+1??

Hace unas semanas una amiga me comentó sobre una película argentina: "Dos más dos". Ella se preguntaba, qué es la fidelidad en realidad. O mejor dicho, cuál es el concepto que cada uno, individualmente o con su respectiva pareja, tiene acerca de la fidelidad.
No sé si habrán visto la película, es una comedia dramática estrenada en 2012. Yo, después de esta conversación con mi amiga, con la que muy a menudo hacemos debates filosóficos, serios y no tan serios, sobre la vida y sus menesteres (jojo) no resistí quedarme con la curiosidad de saber qué la había llevado a ella a ese interrogante, así que me dispuse a ver la película. Sin contar detalles, para no arruinar el factor sorpresa de quien esté leyendo y no la haya visto todavía, pienso:
• Cuán diferente es, bueno y malo, sano e insano, "fiel e infiel" para cada uno.
• Qué es lo que le pasa a un ser humano cuando tiene todo lo que la mayoría definimos como "una buena vida". ¿Se siente feliz o aún así y todo sigue teniendo la necesidad de perseguir "ese algo más" que aún desea conquistar o experimentar?
Sin ánimos de ofender a nadie, porque es sólo mi opinión personal, yo creo que en la peli están todos "de atar", jeje. Aunque comparando con las culturas que admiten más de una esposa para los hombres, no se puede negar que es mucho más democrático. Creo que eso también lo comentamos con mi amiga.
En fin, la peli me resultó cómica, me encantó el papel de Adrián Suar, y está buena para pasar el rato. La mejor frase: "Suspicacia mi amor, suspicacia". 


Esta es la portada: 

(imagen extraída de google imágenes)


¡NOS VEMOS!

miércoles, 28 de agosto de 2013

August, Wednesday 28th ♥

It’s just a song, but it comes from me, and it’s all for you
Jeg elsker deg

Make you feel my love -Adele- 
(video extraído de youtube)



¡NOS VEMOS!
Aymará;

Se acerca el gran momento

Dentro de "poquitísimos" días me estoy yendo de viaje. Bueno, en realidad no son taaaan poquitos. Pero los estuve contando desde hace tanto tiempo que ya a esta altura, poco menos de un mes, no es nada para mí!
Estoy entusiasmada y súper feliz de que haya llegado al fin lo que tanto estuve esperando. Aunque también me siento un poquito nerviosa por todo lo que tengo que dejar organizado acá y todo lo que me espera allá, jeje. Es que no me voy por poco tiempo, y tampoco precisamente a la vuelta de la esquina. En principio, el plan es estar por un par de meses y me estresa un poco la idea de estar tanto tiempo lejos de casa y sin poder hablar mi propio idioma, incluso me asusta pensar que no vaya a poder comunicarme "bien" con la gente. O quizás sólo se trata de la ansiedad "normal" pre-viaje, preparativos, y "demases" que acosan mi pobre cabecita. :P
La cuestión de extrañar es ooootro tema, también. Empezando por mi "home sweet home" que no es que tenga un palacio ni mucho menos, pero es mi lugar, mi espacio, mi refugio, equipado con todo lo que necesito y me gusta tener a mi alrededor. Mi mamita querida, mi gata (que está en segundo lugar porque es como mi hija), el resto de la familia, mis amigos, todas las personas y cosas especiales que uno elije tener cerca a diario porque son parte de nuestros momentos felices. ¡Y la comidaaaaaa!! Que también me hace muyyy feliz (jaja).
Bueno, ya basta, que al final parece que quiero más quedarme que irme, pero no es así. Este viaje es muy especial, y además allá, me espera mucho por conocer, disfrutar y aprender, y "ése motivo de mi viaje" que lo hace realmente especial y único. Es sólo que pensando en perspectiva, se me vienen a la cabeza las cosas que voy a tener lejos y que no me puedo llevar, jaja.  
¿Tuvieron alguna vez "sentimientos encontrados"? Eso, es exactamente lo que siento yo, "right now". 
Ahora que pienso, no sé si voy a extrañar allá "lo de acá" o cuando vuelva, vaya a extrañar "lo de allá" estando acá.
Y me voy yaaaaa, que tengo terapia, y me hace mucha falta. :P


Very soon ♥

¡NOS VEMOS!

martes, 27 de agosto de 2013

Cambio decorativo y reconciliación

Durante todos los años que viví en este departamento renegué arduamente de los baños. Porque no me gustaba el color (es un edificio un tanto viejo y no sé a quién se le habrá ocurrido elegir semejante combinación), porque no tenía suficiente espacio para guardar mis cosas (cremas, secador, planchita, buclera, cepillo de dientes, pasta de dientes, desodorantes, perfumes, sales de baño, y demás productos femeninos indispensables para mi vida diaria, ja), especialmente en el baño principal siendo que es el que tiene ducha y por ende necesito guardar más cosas.
Porque el piso es una pesadilla, ya que cualquiera que ose de dejar caer una sola gota de agua al piso ¡SE NOTA! Y no es que sea obsesiva de la limpieza (aunque dentro de mi entorno social más cercano me han hecho esa mala fama, jeje) pero de verdad que es un piso bastante enemigo de lo estético. Y porque no tenía mesadita, entonces a la hora de lavarme los dientes, peinarme, hacerme limpiezas de cutis, maquillarme, etc... me encontraba en la obvia necesidad de practicar el malabarismo.
Como ya estaba bastante cansada de esta enemistad tan arraigada entre mis baños y yo, pensé lo siguiente: Si no puedes contra tu enemigo, ¡únetele! Y eso hice. Primero organicé las ideas en mi cabeza, de acuerdo a lo que se adaptaba a mis necesidades, a mi gusto y a mi bolsillo (que no es un detalle para nada menor). Tomé las medidas para ver con qué espacio contaba y salí a ver distintas opciones. Lo primero que se me había ocurrido era comprar esos mueblecitos de rattán que es bastante común ver en baños de revistas de decoración. Pero cuando vi los precios, cambié de idea casi instantáneamente. Pensando en lo que me gusta a mí (hablando de deco), me parecen súper lindos los ambientes tipo cuentito de duendes, así que me acordé de una mueblería donde, siempre que pasaba, encontraba muebles que me recordaban a una especie de bosque encantado, jaja. Pero el plan B también tuve que abortarlo después de que absolutamente ningún mueble se adaptaba al espacio de mi baño. Completamente desilusionada volví a mi casa y me puse a buscar en Internet, encontré una mueblería donde hacían muebles a medida y eran del estilo "duende" como yo buscaba. Después de volver loca a la chica que me atendió (con las medidas tan estrambóticas, precios y demás) decidí que el plan C era el que mejor se adaptaba a lo que yo estaba buscando. Y bueno, por la alegría del momento, de haber encontrado una posible solución a mi "desamor bañil" decidí, también, comprar una mesa de comedor nueva, una "mesita de arrime" (que así parece que se llaman esas mesas angostitas, largas y altas que van contra una pared, no sé si se entiende) y restaurar unos muebles viejos (de uno de mis abuelos) para la cocina y el comedor.
La restauración de los muebles viejos no la hice yo. ¡Sólo me encargué de las directivas! Pero de todos los demás muebles, ¡sí! Los hice hacer "a mi medida" y pedí que me los entregaran con la madera virgen, de la pintura me encargué solita!! Debo confesar que, más allá del trabajo, el olor desagradable y la mugre de esos días, la emoción por ver si quedarían bien y cómo se verían en sus respectivos lugares hizo que me tomara sólo 3 días dejarlos listos, pintados y acomodados. Finalmente, el esfuerzo ¡valió la pena! 
El baño principal, que era mi mayor “preocupación” quedó de cuentitos, como quería, súper cómodo y lindo. Cambié también la cortina, hice hacer una con volados escalonados de broderie y plumetí en los tonos de mi baño, cuaaack, puse un espejo que ocupa toda la pared y compré una alfombrita nueva. Y ya que andaba con aires de cambio, aproveché, además, a cambiar los colores del living y de mi habitación. Pero eso sólo consistió en cambio de mantas, almohadones, acolchado y detalles en las cortinas. La cuestión es que, aparte del mini cambio decorativo que hice en las otras partes de la casa, me reconcilié al fin con mis baños! Especialmente el que quedó tipo "bosque encantado". Es más, ya me gusta el color y todo :P
Ustedes, ¿cambian seguido la decoración de sus casas o sus dormitorios? ¿Tienen alguna parte de la casa con la que no logran reconciliarse?

Y así quedó todo♥

¡NOS VEMOS!

El arte de amar-Erich Fromm

Hace un tiempo me recomendaron este libro y me interesó enseguida leerlo. Volví a mi casa, y antes de subir, pasé por la librería de al lado y me lo compré.
Me atrapó tanto que lo terminé súper rápido. Y cada vez que encuentro la oportunidad se lo recomiendo a alguien.
Está dividido en varios capítulos y habla sobre el amor entre padres e hijos, el amor fraternal, materno, erótico, el amor a sí mismo y el amor a Dios. De la desintegración del amor en la sociedad occidental contemporánea y sobre la práctica del amor.
Sinceramente, en mi opinión personal ¡es excelente!
Para los o las que no, les dejo la frase con la que el autor nos introduce al tema:
"Quien no conoce nada, no ama nada. Quien no puede hacer nada, no comprende nada. Quien nada comprende, nada vale. Pero quien comprende también ama, observa, ve… Cuanto mayor es el conocimiento inherente a una cosa, más grande es el amor… Quien cree que todas las frutas maduran al mismo tiempo que las fresas nada sabe acerca de las uvas"
Y el primer capítulo empieza con la siguiente pregunta: ¿Es el amor un arte? En tal caso, requiere conocimiento y esfuerzo. ¿O es el amor una sensación placentera, cuya experiencia es una cuestión de azar, algo con lo que uno <<tropieza>> si tiene suerte?
Y la siguiente primera respuesta: Este libro se basa en la primera premisa, si bien es indudable que la mayoría de la gente de hoy cree en la segunda.
Y yo, de curiosa no más, pregunto: ¿Qué pensaría el pobre Erich Fromm al día de hoy?
En fin, lo súper recomiendo, simplemente ME  EN-CAN-TÓ.
¿Alguien de ustedes lo leyó? ¿Qué les pareció?



¡NOS VEMOS!